Aumentando la eficiencia y eficacia de las organizaciones en Analytics y Big Data a través del Gobierno de Datos

A la búsqueda de eficiencia y eficacia de las organizaciones a través de la mejora de procesos, se está tornando clave el gobierno de los activos de información para la correcta implementación de analítica de negocios y big data. Considerando al dato como el activo de información más importante de una organización debemos ser capaces de asegurarlo durante todo su ciclo de vida.
Usualmente se definen 4 áreas de acción clave que suelen guiar las iniciativas que buscan una óptima explotación de los datos de las organizaciones:

Construcción de las habilidades básicas
Las organizaciones deben desarrollar y/o consolidar sus capacidades para recolectar, gestionar y analizar sus datos de forma de lograr el conocimiento, inteligencia y visión requeridos para apuntalar sus estrategias.

Integridad de los datos
Es necesario que se realice una adecuada gestión de los datos maestros, estándares y políticas asociados a su gestión, y se conozca claramente quién es responsable por recolectar qué dato y para qué. Para esto, probablemente, no se requiera más sistemas, sino que se trata de racionalizar la recolección de los datos y mejorar la forma en que se comparten y analizan. La situación actual hace que a menudo no se puedan conocer las preferencias de los clientes, realizar una evaluación rigurosa de la efectividad de las acciones o campañas llevadas a cabo ni del retorno de las inversiones asociadas. Prácticas adecuadas que guíen la recopilación de los datos del cliente, el análisis de tendencias y el uso de la tecnología digital, permitirán el desarrollo de un enfoque que permita contestar estas preguntas.

Activación de datos de calidad
Investigaciones asociadas a la activación de datos de calidad y Data Analytics, han remarcado que el volumen, la variedad y la velocidad de generación de los datos son necesarios para lograr análisis de mejor calidad. Por otro lado, la calidad, precisión y/o integridad de los datos suelen ser a menudo el mayor obstáculo para que las organizaciones tomen buenas decisiones. Por otro lado la dificultad para compartir los datos suele ser un problema. Con frecuencia, los datos proporcionados por un individuo o empresa se hacen bajo ciertos términos y condiciones, que hacen que no se pueda compartir automáticamente con otra organización sin consentimiento previo. Este tipo de situaciones son las primeras que se deberán analizar para aprovechar el potencial de Big Data.

Balanceo de derechos
Se debe mantener un óptimo balance entre los derechos individuales respecto a privacidad y confidencialidad y los beneficios que se pueden obtener de compartir información. Para esto, es importante realizar una muy buena comunicación de la propuesta de valor, crear confianza y reducir la incertidumbre respecto a cómo se utilizara los datos, así como garantizar que éstos son gestionados y administrados bajo un excelente nivel de seguridad y control. El uso de los datos ofrece un potencial enorme para mejorar los servicios que reciben los clientes, pero se requiere inversión, innovación e imaginación para lograrlo.

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Gobierno de Datos
La práctica que da soporte a estas iniciativas es el Gobierno de Datos. Lo definimos como la orquestación de personas, procesos y tecnología que permiten a una organización gestionar los datos como un activo empresarial. Detrás de esta definición se esconde el verdadero propósito fundamental de esta práctica que no es más que construir confianza.
Para ello es necesario identificar:

  • dónde se crean datos,
  • quién los necesita,
  • dónde se utilizan,
  • qué pasa con ellos a través de su camino,
  • cuál es su calidad y
  • quién hace copias de esa información y quién realmente la necesita.

Estas respuestas nos van a brindar como beneficios:

  • confianza en los datos,
  • habilidad para tomar decisiones a tiempo y
  • confianza en los reportes regulatorios y financieros.

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

Un programa de Gobierno de Datos involucra a toda la organización siendo sus participantes todos aquellos relacionados con los datos (creadores, consumidores, ejecutivos y técnicos), junto con quienes toman las decisiones en la organización.
Las funciones que involucran al Gobierno de Datos respecto a las diferentes áreas incluyen:

  • definir políticas, estándares y estrategias;
  • definir estándares de base de datos;
  • apoyar en migración y conversión de datos;
  • asegurar la consistencia del modelo de datos y sus definiciones;
  • dar apoyo a la arquitectura de todas las soluciones de la organización BI/DWH, Metadatos, SOA, Master Data Management (MDM), Enterprise Data Management (EDM), etc;
  • apoyar al perfilado, limpieza y unificación de datos para asegurar la calidad;
  • definir y monitorear las métricas de calidad;
  • definir el acceso y la seguridad para la protección de datos sensibles;
    apoyar a la gestión de riesgos;
  • asegurar el cumplimiento de requerimientos de regulaciones, leyes, contratos;
  • determinar las necesidades de información sobre datos maestros;
  • apoyar a las soluciones de Gestión de Datos Maestros (MDM);
  • integrar y mantener soluciones de datos, incorporando nuevas fuentes internas o externas a la organización;
  • definir y mantener los estándares de metadatos;
  • implementar un sistema de gestión de metadatos;
  • crear, capturar, almacenar y mantener los metadatos;
  • gestionar el repositorio de metadatos;
  • gestionar el acceso y la distribución de los metadatos para glosario de datos, reportes y Datamart.

En próximos artículos estaremos analizando cómo implementar un programa de Gobierno de Datos. 

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Ing. Gustavo Mesa    @gmesahaisburu

Consultor – Data & Analytics

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